Imagine que su portátil, tableta o teléfono móvil tuviera forma cilíndrica, como una botella de agua. No sería fácil ni cómodo de llevar en su bolso, ¿verdad? Ahora piense en la cantidad de aire que hay entre las botellas de leche, agua o bebidas en su nevera. Exacto, su forma no es precisamente ergonómica. El conocido diseñador, artista y arquitecto israelí Ron Arad partió de esta premisa al diseñar la botella de agua Ripples que aquí le presentamos. Sorprendentemente, su forma rectangular y plana, con lados que miden 14,8 x 3 x 21 cm, tiene capacidad para nada menos que medio litro de agua y es extremadamente práctica. Disponible en una gama de colores, la botella Ripples tiene un tamaño A5, que es el de una tableta estándar, por lo que cabe perfectamente en cualquier bolso de mujer, maletín o mochila. Además de su sorprendente forma para una botella, el diseñador no olvidó el atractivo del producto, dotando a la superficie del plástico con el que está fabricada de una estructura que recuerda a la superficie de un lago rizada por las olas (de ahí su nombre). Las arrugas de la superficie del recipiente no solo son estéticamente agradables, sino también estructuralmente importantes y hacen que la botella sea robusta y resistente. ¿Y cómo se bebe de ella? La esquina del recipiente es también su tapón, y esta solución no solo no estropea las armoniosas líneas del diseño, sino que también es un cambio agradable.

• Botella de agua Ripples, transparente