¡Los amantes del whisky están de enhorabuena! No solo pueden deleitarse con los más de 30 matices de sabor que encierra el whisky de malta, sino que, además, esta noble bebida no requiere de una bodega con ventilación especial ni de una temperatura específica; un simple mueble bar es suficiente para guardarla. Y lo que es más, una vez abierta, el whisky puede conservarse tanto tiempo como su dueño tenga la osadía de mantenerlo en la botella, aunque es bueno recordar que, si queda menos de la mitad, conviene trasvasarlo a un recipiente más pequeño. Sin embargo, haya poco o mucho, su precioso color debe realzarse sirviéndolo en una garrafa, que no solo lucirá majestuosa en un bar o en la mesa de un estudio, sino que también permitirá agasajar a los invitados con gran estilo. La garrafa de cristal de la cristalería Julia, una casa con años de tradición y gran pericia en el arte de servir bebidas alcohólicas con elegancia, es el recipiente perfecto para esta misión. Con una forma clásica que se adapta a la perfección a la mano, esta garrafa viene rematada con un tapón pulido y será un regalo espléndido para cualquier aficionado al 'Uisce beatha'. ¡Sláinte!
¿Tienes dudas o preguntas sobre el producto? ¿Necesitas información adicional? Haz una pregunta
Política de devolución de 30 días
más de 500 000 pedidos
99 % de clientes satisfechos
más de 30.000 opiniones
Este producto no está disponible temporalmente
Mensajería DHL