¿Le encanta el aroma de la fruta fresca? Entonces le encantará la fragancia que le envolverá con la vela Currant, con su aroma a grosellas dulces con un toque de jugosas mandarinas. Esta vela, perteneciente a la distinguida colección Core, se distingue por su elegante forma de reloj de arena y las tapas de madera tan características de los productos WoodWick. El tamaño más pequeño, con un peso neto mínimo de 85 g, arde durante hasta 40 horas; el tamaño mediano, con un peso neto mínimo de 275 g, arde durante hasta 100 horas; mientras que la vela más grande, con un peso neto mínimo de 608 g, arde durante hasta 175 horas.
Crepita al arder. Así describe la marca WoodWick, fabricante de esta vela, a sus creaciones. ¿Pero qué significa esto realmente? Las velas de la marca americana WoodWick se caracterizan por una mecha de madera natural que, al quemarse, emite un sonido relajante, que recuerda al chisporroteo de la leña en una chimenea. Pero la mecha de madera es solo el principio... Las velas WoodWick también destacan por sus preciosas formas, sus elegantes tapas de madera, su prolongadísima duración y su rápida difusión de las fragancias. Y esas fragancias... bueno. Es difícil describirlas con palabras. ¡Hay que sentirlas! Pero para ser fieles a la descripción, diremos que, gracias a una cera de la más alta calidad mezclada con soja, aceites aromáticos altamente concentrados y la imaginación de un equipo de especialistas en placeres de lujo, las velas WoodWick huelen a un paseo por el paseo marítimo, a macarons de jengibre, a primer amor, a sábanas limpias, a un agradable día de spa y a caramelos con un toque nevado de auténtica sal marina... Es decir, a todo aquello que usted adora.

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